la mudanza

zócalos
tengo la casa rodeada
abajo, como mascotas
forman displicentes
el nuevo hogar
y la misma música

afuera llueve
adentro los graves
recuerdan

que los muy chiquititos  se rompen
y los grandes
se quiebran


escribir
es una forma de combatir
malos recuerdos

calo la pintura nueva
el frío nuevo
borracha me pinté las uñas
me sentía sola

a ver si viene todo
en el mismo viaje
y quien dice viaje
piensa en vivir el día

II

de día la oreja mojada
ronronea
en el estómago


“yo creía
que el escritorio era blanco, blanco”


cambié de casa

puertas negras
el pasillo se ilumina
cuando alguien entra
se sabe
el color era
un poco todo
un poco recordaba que

era poco recordada
transitoria
esperaba la lámpara
mientras escribía 
y lo oscuro
no se detenía
en las casas nos sigue la muerte
aunque desde los vidrios

no se vea.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lavandina

sonsos teatro